Ese apartarme de mi ser real y esencial es lo que me llenó de inseguridad y angustia. En algún momento el suelo se volvió movedizo bajo mis pies y los miedos me comieron viva.
... cuando se toca fondo explosionas... y entonces eres impulsada a remontar y subir -no bajar- subir hasta el origen de tí mismo, que es divino...
Volver y agarrarte con fuerza a la claridad mental, buscando la calma, y permitir que aparezca la memoria angustiosa del desamor vivido; esa falta de amor y necesidad de abrazos. Y dejar que aparezcan las lágrimas y dejar que te empapen...
Ahora entiendo que el mismo miedo hace de imán para atraer eso que temes. Yo temía no ser querida y ¡cómo es la mente! ese miedo cargado de energías densas de angustia y ansiedad, espantaba a las personas de mi alrededor...
Ahora entiendo que primero debo amarme a mi misma... son sólo palabras que intentas razonar al principio. Pero cuando estas palabras las pasas de la mente al corazón y las pronuncias desde ahí: entonces las sientes y consientes AMARTE... los miedos van desapareciendo, dejando esparcir tu ánimo...
1 comentario:
Es curioso como trabaja el miedo...Se cuela como un ladrón silencioso y va tejiendo...y de alguna manera empiezas a creer su verdad como la VERDAD. Es entonces cuando por un chispazo unas veces y otras por un esfuerzo consciente de búsqueda de "vida",recuerdas como volver, y cuando has vuelto, ayyy... no hay nada comparable a mirar la vida desde los ojos del AMOR! Todo lo alcanza, todo lo abarca, todo lo puede...transforma pasado, presente y futuro...y me digo a mi misma: -¡desearía no separarme jamás de esta sensación!- pero yo se que este deseo también lleva adherido en su esencia un temor y por eso digo: - Desearía permanecer aquí para SIEMPRE pero si no fuera así,si en algún momento diera por cierta la mentira de la desesperanza, buscaré y buscaré con voluntad indomable (como decía Gandhi)el camino de vuelta a mi HOGAR.
Publicar un comentario