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22 marzo, 2011

Las Palabras

A veces, las palabras, como si tuviesen vida propia, se instalan en la mente y se enraizan, multiplicándose de mala o buena manera. Se apropian del terreno, lo abonan insistentemente, e invaden otros territorios, como el corazón, donde les gusta -como si fuesen topos- hacer madrigueras.

Cuando las palabras son negativas pueden ser muy sólidas y afiladas, resistentes; rencor, miedo, venganza... estas palabras se alimentan de los ricos jugos del amor hasta secarlo o empobrecerlo.

También puede suceder que la falta de palabras dulces y amorosas cree una sequía en el ser. El sol y la lluvia de palabras amables son necesarias para airear las emociones y alimentar el corazón; son energizantes, reparadoras y sanadoras de todos los sistemas que mantienen vivo al ser humano y las precisa para su felicidad interior.

Las palabras funcionan en dos sentidos; quien las pronuncia y quien las escucha; quien las da y quien las recibe. Aunque salen por la boca, las carga de sentido el corazón: amor-odio... simpatía-desconfianza... Y aunque las recibe el oído, las interpreta el corazón, con los mismos sentimientos.

La palabra se dice, se lee, se escribe, se susurra, se lanza, se vomita, ... se acompaña con miradas, gestos y se adornan con sonrisas y besos.

La palabra salva, condena, es arma para la confabulación, la confrontación y la manipulación, para el conjuro y la maldición, es promesa o maldición. Las hay que envenenan o enamoran. La palabra puede ser oración, llamada de auxilio. La palabra enriquece o degrada. Convence o engaña. Es conductora y enardece. Si se le pone melodía, embelesa.

Y hay también palabras positivas y creadoras, que tienen Poder: Así sea. Así es.

20 marzo, 2011

Sentir / Pensar

No se pueden hacer las dos cosas a la vez: sentir y pensar. Mientras sientes, no piensas; tus cinco sentidos están entregados enteramente en sentir y disfrutar la vivencia. Porque en el momento en que entra la mente en acción es para rememorar o grabar el placer que se sintió... en el peor de los casos se dedica a comparar, analizar, juzgar y entonces puede que lo empeore fabricando inseguridad, miedos...

Las personas que tienen el cerebro como una máquina de "pensar" no saben cómo parar los pensamientos que revolotean por cientos sin descanso por lo que no tienen muchas posibilidades de SENTIR, pues la mente y el corazón los tienen desconectados.

La única posibilidad para detener la mente es creando el hábito de sentarse en silencio e ir al interior de uno mismo y observar cómo uno se siente. Simplemente observar. Pausadamente, respirar conscientemente, lenta y profundamente, para que poco a poco los pensamientos se vayan calmando... la mente entonces pasará a un segundo plano sin darnos cuenta y se ira aquietando en el silencio... es entonces cuando comenzaremos a SENTIR...

19 marzo, 2011

Velos de Ilusión



Estamos inmersos en la Dualidad y para salir de la mente dual, que sólo crea conflicto, seamos capaces de VER y deshacer los velos de ilusión que nos envuelven (y aprisionan).

La ilusión proviene de la mente sin desarrollar y de cómo ella percibe las cosas. La misma individualidad es una ilusión:

"Cuando de Dos hacemos UNO entonces entramos en el Reino", dijo Jesús.

La ceguera humana es comparable a querer ir a la Luna en globo; nuestra capacidad de percepción no está desarrollada pero, en nuestra arrogancia, estamos convencidos de que lo sabemos todo. Y ese "todo" está limitado a lo que nuestros ojos físicos ven.

Cuando seamos capaces de percibir que todo es una gran Unidad, que no hay nada separado... de que todos somos una sola Conciencia, entonces nos sentiremos seres multidimensionales, seres de Luz.

17 marzo, 2011

Rendirse al espíritu no es perder

Si no estás espiritualmente conectado a la Tierra y si no está tu mente conectada a tu alma...y si no está conectada tu esencia divina al Universo... la vida no tiene sentido ...

Si no te abres a comprender la realidad espiritual que existe en la Naturaleza, si te resistes a aceptar hay una fuerza y un orden superior... y si te niegas a entrar en el flujo de las energías puras que mueven el Universo... la vida es como un campo de batallas ...

No tengas miedo a rendirte y reconocer no sabes nada y confesar estás perdido... La energía creadora del Amor Incondicional es todo-misericordia y siempre está ahí, esperando este momento de rendición, para abrazarte.

09 marzo, 2011

Soy Observadora. Soy la Conciencia.

Los mecanismos de cómo funciona el ser humano son complicados. Sólo cuando logramos vernos desde nuestra conciencia, comenzamos a entenderlos y así comprendernos a nosotros mismos. Y a partir de ahí, podemos hacer un trabajo de des-educar; deshacer hábitos y desbloquear las energías de experiencias vivenciales que han condicionado nuestra primera infancia y, por ello, toda nuestra vida hasta el presente.

Voy a escenificar que me llamo Conciencia y que tengo la capacidad de observar. Observo que la mente está sin desarrollar; actua en todo momento, sin descanso. Juzga, critica, se queja, duda, recela... pero también fantasea y se escapa muy a menudo al mundo de la fantasía. En realidad, su dispersión hace que viva en conflicto permanente y agotada.

A las emociones las veo revolotear como mariposas; tan centradas en sí mismas. A veces llegan a ser tantas, y tan contradictorias, que resultan agobiantes. Sólo algunas son bellas. Otras totalmente caducas, desenfocadas o perjudiciales.

La mente sin desarrollar se dispersa y se mueve entre la duda y los miedos, debilitando así la Fuerza de Voluntad...
Como Conciencia Observadora me siento perpleja. Pero una vez que la Conciencia VE, no hay marcha atrás, ahora solo queda seguir adelante hacia un cambio dimensional.

A través de centrar la energía mental dispersa y enraizarnos en el Presente, expandemos nuestra Conciencia.