Ahora ya son miedos los que ocupan y se hacen fuertes en un cerebro de mente y conciencia no desarrollada. Son como la mala hierba en un huerto descuidado que termina por invadir y ahogar todo lo sembrado.
No nos enseñan a pensar y mucho menos nos arman con herramientas para combatir y aniquilar a los miedos: sólo fármacos para sedar o adormecer a los miedos... para atontar más al cerebro. Para hacerlo dependiente, -siempre seres dependientes-, y eso mismo nos aleja y separa de nuestra verdadera naturaleza; como seres completos.
Los miedos no se van solos, no desaparecen por voluntad propia, no los combatimos desde la mente y la razón. Es decir, no basta con mirar a otro lado o esconder la cabeza bajo tierra como hacen las avestruces. Los miedos cuando se hacen sentir, manifestándose como ansiedad, inseguridad... o nos han hecho tímidos, volubles e influenciables, con baja autoestima, etc, etc, no podemos decirle al niño o al joven "¡tienes que ser valiente!"... "¡Vaya tonteria, eso no es nada, tonto!"
...porque los miedos se apoderan de la mente finalmente si no los atajamos a tiempo. ¿Cómo? Desde el amor indudablemente. Desde el ánimo. Desde la paciencia y la compasión. Todos tenemos un miedo u otro, unos lo llevan mejor que otros, muchos ya se han deshecho de los más gordos o ya los tienen localizados y les hacen frente.
Estamos aprendiendo, estamos tomando Conciencia de ello. Ya estamos saliendo del victivismo y el pobrecito de mí. Estamos sacudiéndonos de encima una educación religiosa castradora y con mucha carga de culpa. El miedo es lo contrario del amor. El miedo es lo que obstaculiza, bloquea y frena las manifestaciones de amor.
Las religiones pretenden que las personas "se hagan" buenas desde el miedo al infierno. En los colegios en lugar de inculcar el AMOR al Saber, se amenaza con castigos... y así todo, pero...
Ahora, es el comienzo ¿no lo sentís? de una Nueva Conciencia de Amor, con mucha Luz.
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