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11 junio, 2006

Amor ciego

Tengo una amiga que el amor le jugó una muy mala jugada. El caso es que ella aseguraba y juraba que era amor lo que sentía por un hombre que se cruzó en su vida de manera casual. A pesar de que le aconsejamos y le advertimos de la locura que iba a cometer, esta mujer dejó marido e hijos y se marchó convencida haber encontrado el AMOR y la felicidad. Fue una historia muy triste.

Este hombre que llegó al pueblo intentando salir de las drogas y el alcohol era realmente un buen hombre pero un infeliz al fin y al cabo, vulnerable y débil, muy sensible y tremendamente falto de afecto. Se vio envuelto en un enredo amoroso inesperado en el que resultó ser el protagonista.

No entendimos los amigos por qué esta mujer, casada y con hijos, perdió la cabeza hasta el punto de ser ella quien "sedujo" a este hombre al que intentábamos apoyar y ayudar para que se recuperase física y psíquicamente de tantos años como indigente y metido en el mundo de la droga.

Una historia tremenda que no la cuento con detalles porque no me creeríais... pero de esa historia nadie salió ileso; los hijos, el marido, el otro y la propia mujer, después de pasar ese tiempo nebuloso de enamoramiento e irrealidad, cada uno vivió a su manera un verdadero infierno.

Ahí lloramos todos... porque ¿podéis señalar quién es la víctima en esta historia? El matrimonio se rompió, los hijos quedaron conmocionados. La mujer sé que tuvo un hijo de él pero que finalmente se separaron y... ese "otro" fue lanzado nuevamente a la calle. Me comentaron el otro día que lo vieron vendiendo pañuelos de papel en una calle de una gran ciudad.

Nadie, jamás, comentó nada sobre el asunto. Quizás porque, aparte de que era demasiado doloroso, porque sobrepasaba el absurdo de la miseria humana. Pero he vuelto a recordarlo porque ahora mismo una amiga mía, por amor, está regalando su VIDA.

En este caso, él la enamora y durante un año se muestra como el enamorado perfecto. Pero en el momento en que ella habla de casarse y se pone seria diciendole no quiere que juegue más con las drogas... ¡Ay! No estoy hablando de adolescentes sino de personas adultas que ya arrastran varios "fracasos" o experiencias matrimoniales.

¿Qué pasa? Resulta que esta amiga, que toda la vida ha estado sufriendo por enamorarse de hombres que no eran adecuados por irresponsables y vividores... ahora, una vez más, le ciega el amor y es él -sintiéndose ya fuerte- el que ha puesto condiciones que la rebajan a la infelicidad, que los demás predecimos como no muy lejana.


No podemos juzgar. Nadie está libre de que el amor le ciegue y haga una mala elección. No se trata de eso.

Es muy difícil ver la realidad desde una posición de debilidad, falta de afecto y autoestima.

Yo me pregunto una vez más, cómo es posible que esto suceda una y otra vez. Y que no sirva de nada que aconsejes, que adviertas... desde fuera se ve la cruda realidad, pero desde dentro sólo sientes, ves y oyes lo que necesitas ver y oír.

Engañarnos a nosotros mismos es el primer paso hacia la desdicha.

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